CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE
Navegamos con un remo cojo, el vendaval que sacude todas las aguas ibéricas, ha embarcado en nuestra nave y se desplaza cual tornado por la cubierta, arramblando con todo lo que se interponga en su camino…Hoy la tripulación se ve mermada y buscamos con uno menos, la quimera…
[RÁFAGA]
Puede que quién oiga hablar de nuestras singladuras diarias por la procelosa mar de las ondas hertzianas, piense que somos un puñado de aficionados, que intentan salir a flote cada día, entusiastas en un espacio y en un tiempo, donde todo ya está inventado y donde tantos otros tienen mucho más que contar y que navegar…
Sin embargo, yo creo que esa posible inexperiencia si se maneja con la garra, y a la vez con la templanza, necesarias para maniobrar con el timón, puede ser como el ansiado barlovento, es decir, una ventaja…
[RÁFAGA]
Lo que sin duda sé, es que a medida que avanzamos en periplos, es fácil perder la frescura que nos otorga el viento a favor, incluso en jornadas como la de hoy. Y como si de un tirar y aflojar cuerdas se tratara deberíamos de encontrar el punto intermedio, para continuar batiendo las aguas sin necesidad de hacerlas trizas.
Busco la respuesta a esa virtud que se me antoja como un gran secreto a resolver, la mesura, la templanza entre dos polos opuestos: la sapiencia veterana y la inocencia del aprendiz…
[RÁFAGA]
Seguimos navegando, la garganta se me seca, incluso un picor anuncia toses…quizás cierto grado de angustia me embarga, no sé si por no dar con esa respuesta o por no encontrar nuestro objetivo soñado. La solución puede que en esta singladura esté en la copa de brandy que me aguarda abajo. Un buen trago necesario para continuar con la pesquisa de nuestra anhelada Ciudad Invisible…
FUNDIR CON UNA BUENA DOSIS DE EXPERIENCIA
[RÁFAGA]
Puede que quién oiga hablar de nuestras singladuras diarias por la procelosa mar de las ondas hertzianas, piense que somos un puñado de aficionados, que intentan salir a flote cada día, entusiastas en un espacio y en un tiempo, donde todo ya está inventado y donde tantos otros tienen mucho más que contar y que navegar…
Sin embargo, yo creo que esa posible inexperiencia si se maneja con la garra, y a la vez con la templanza, necesarias para maniobrar con el timón, puede ser como el ansiado barlovento, es decir, una ventaja…
[RÁFAGA]
Lo que sin duda sé, es que a medida que avanzamos en periplos, es fácil perder la frescura que nos otorga el viento a favor, incluso en jornadas como la de hoy. Y como si de un tirar y aflojar cuerdas se tratara deberíamos de encontrar el punto intermedio, para continuar batiendo las aguas sin necesidad de hacerlas trizas.
Busco la respuesta a esa virtud que se me antoja como un gran secreto a resolver, la mesura, la templanza entre dos polos opuestos: la sapiencia veterana y la inocencia del aprendiz…
[RÁFAGA]
Seguimos navegando, la garganta se me seca, incluso un picor anuncia toses…quizás cierto grado de angustia me embarga, no sé si por no dar con esa respuesta o por no encontrar nuestro objetivo soñado. La solución puede que en esta singladura esté en la copa de brandy que me aguarda abajo. Un buen trago necesario para continuar con la pesquisa de nuestra anhelada Ciudad Invisible…
FUNDIR CON UNA BUENA DOSIS DE EXPERIENCIA
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