martes, octubre 23, 2007

Cuaderno 23 de Octubre

CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE

Después del mascarón de proa, los ojos del vigía son los faros de una nave…y cómo cambia todo cuando baja por la escala una mirada y asciende a lo alto del palo mayor un nueva…Los ecos de nuestra singladura permanecen en la memoria de los que los escuchan de múltiples formas…incluso llegando a transformar la utopía…
[RÁFAGA]
Observar, contemplar, examinar, ver, vislumbrar…acciones todas obligatorias para un buen marinero que trabaje en la cofa…y a pesar de ser sinónimos son labores, cada una de ellas, de las que depende en gran parte el curso y el rumbo de cada periplo…
Tantos han pasado por aquí, así como realidades existen en este proceloso mundo donde los recuerdos son los anteojos de nuestra mirada…
Así cuentacuentos, argonautas socarrones, doncellas místicas o simplemente duendes que una vez hicieron su aparición espontánea, dejaron su impronta en este diario…Una firma en la que se puede, a día de hoy, descifrar su manera de prestar atención a cada golpe de remo que íbamos dando en el transcurso del espacio y del tiempo…
[RÁFAGA]
Seguimos navegando…, para mí, la mar hertziana en cada jornada adquiere diferentes matices…según sea mi estado emocional…y así lo plasmo, seguramente si otro fuera el que a diario utilizara papel y pluma para narrar nuestras aventuras y desventuras, las imágenes creadas serían distintas…
Por eso existen tantas como personas, por eso cada día preguntamos por ella, porque cada alma visionaria suspira con su propia y querida Ciudad Invisible…

FUNDIR CON DOS LENTILLAS

1 comentario:

Nívola frívola dijo...

Ahhhhhhhh... una ciudad invisible!!! Saludos te sigo leyendo