CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE
La brisa golpea ligeramente los mástiles de madera y el agua de la procelosa mar de las ondas hertzianas tamborilea suavemente el metal del mascarón de proa…, tarde soleada en la que las gaviotas nos anuncian próxima la costa, estas planeadoras hacen de plañideras y se unen al coro melódico que mece nuestro último día de labor semanal…
[RÁFAGA]
Aunque es tiempo para dar una leve cabezada, la cofa a la vista de todos no es espacio para dar rienda suelta a la mejor tradición ibérica…así que hago que vigilo el horizonte…y ante la ausencia de icebergs a la vista , me pertrecho con unos lupos solares y sueño que estoy despierta, o duermo mientras la realidad y lo que acontece, se asemeja a un “deyavu”, revivido cientos de miles de veces en esta nave errante: navegamos sin quimera a la vista, pero con el alma desembocando en ella…
[RÁFAGA]
Soñamos con nuestro descanso, hacemos planes, proyectos más viables que la búsqueda de la utopía, envidiamos otros paisajes…, puede parecer paradójico pero el salitre, el aire puro el cielo azul y las aguas turquesas, resultan un tanto claustrofóbicas, son nuestro laboratorio de cada día, en el que hacemos las pruebas ensayo-error con todos los elementos que tenemos a nuestra mano para dar con la fórmula secreta que nos abra el camino hacia el paraíso anhelado…
[RÁFAGA]
Seguimos navegando, el ocaso anuncia su presencia en la distancia. Antes de que desaparezca el último rayo de sol, nuestra ardua labor elegirá otros derroteros, que a cada uno nos conducirán a nuestra querida e íntima Ciudad Invisible…
FUNDIR CON ¡¡FIN DE SEMANA!!!
La brisa golpea ligeramente los mástiles de madera y el agua de la procelosa mar de las ondas hertzianas tamborilea suavemente el metal del mascarón de proa…, tarde soleada en la que las gaviotas nos anuncian próxima la costa, estas planeadoras hacen de plañideras y se unen al coro melódico que mece nuestro último día de labor semanal…
[RÁFAGA]
Aunque es tiempo para dar una leve cabezada, la cofa a la vista de todos no es espacio para dar rienda suelta a la mejor tradición ibérica…así que hago que vigilo el horizonte…y ante la ausencia de icebergs a la vista , me pertrecho con unos lupos solares y sueño que estoy despierta, o duermo mientras la realidad y lo que acontece, se asemeja a un “deyavu”, revivido cientos de miles de veces en esta nave errante: navegamos sin quimera a la vista, pero con el alma desembocando en ella…
[RÁFAGA]
Soñamos con nuestro descanso, hacemos planes, proyectos más viables que la búsqueda de la utopía, envidiamos otros paisajes…, puede parecer paradójico pero el salitre, el aire puro el cielo azul y las aguas turquesas, resultan un tanto claustrofóbicas, son nuestro laboratorio de cada día, en el que hacemos las pruebas ensayo-error con todos los elementos que tenemos a nuestra mano para dar con la fórmula secreta que nos abra el camino hacia el paraíso anhelado…
[RÁFAGA]
Seguimos navegando, el ocaso anuncia su presencia en la distancia. Antes de que desaparezca el último rayo de sol, nuestra ardua labor elegirá otros derroteros, que a cada uno nos conducirán a nuestra querida e íntima Ciudad Invisible…
FUNDIR CON ¡¡FIN DE SEMANA!!!
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