CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE
Nuestra embarcación navega veloz. Viento en popa, pero en vez de a toda vela, con una tuneladora de cien motores gracias a la cual, nos abrimos camino a través del tiempo, porque hay mucho espacio que recorrer y sobre todo, mucho terreno por construir. Especuladores en la edificación de múltiples sueños cortamos las aguas un día más, para dar con nuestra anhelada quimera…
[RÁFAGA]
Mientras avanzamos, raudos y feroces, contemplo en el reflejo salobre, la imagen que mi mente ha cimentado con el paso de los años, de un lugar inquieto, bohemio… llamado hostal “Pimodán”. Una fantasía que nace de una realidad pasada y que me lleva a pensar en la infinidad de sitios inconexos, pero que mi imaginación recorre sin frontera física, ni ley tangible aparente con las que se pueda sustentar su ubicación verdadera, con las coordenadas que marca la razón.
Ojalá lo que tantas veces es una ilusión, sólo plasmada en las líneas de un gran libro, referencia básica para esta tripulación, pudiera ser factible, sin que con ello tuviésemos que hipotecar hasta nuestra alma…
[RÁFAGA]
Qué lejos quedan ya las épocas en las que erigir construcciones en un lugar hostil que lo transformaran en un cobijo más bello y habitable, era posible…
Intentando igualar la beldad de la naturaleza, este mundo ha conocido las urbes más impresionantes, obra de la imaginación y la genialidad humanas. Pero no sé que diantres ha ocurrido, que a día de hoy esta nave errante continúa con su infatigable misión de encontrarla a ella, la única, la más perfecta y etérea. La utopía de las utopías…
[RÁFAGA]
No sé, si es consecuencia de la marejada que se producía ayer en el triángulo de los leones, pero la influencia de sus corrientes llega hasta la cofa y me incita a revindicar el gen femenino que en su estricta mitad tuvo que tener la persona que levantó nuestra querida Ciudad Invisible…
FUNDIR CON ACELERÓN
Nuestra embarcación navega veloz. Viento en popa, pero en vez de a toda vela, con una tuneladora de cien motores gracias a la cual, nos abrimos camino a través del tiempo, porque hay mucho espacio que recorrer y sobre todo, mucho terreno por construir. Especuladores en la edificación de múltiples sueños cortamos las aguas un día más, para dar con nuestra anhelada quimera…
[RÁFAGA]
Mientras avanzamos, raudos y feroces, contemplo en el reflejo salobre, la imagen que mi mente ha cimentado con el paso de los años, de un lugar inquieto, bohemio… llamado hostal “Pimodán”. Una fantasía que nace de una realidad pasada y que me lleva a pensar en la infinidad de sitios inconexos, pero que mi imaginación recorre sin frontera física, ni ley tangible aparente con las que se pueda sustentar su ubicación verdadera, con las coordenadas que marca la razón.
Ojalá lo que tantas veces es una ilusión, sólo plasmada en las líneas de un gran libro, referencia básica para esta tripulación, pudiera ser factible, sin que con ello tuviésemos que hipotecar hasta nuestra alma…
[RÁFAGA]
Qué lejos quedan ya las épocas en las que erigir construcciones en un lugar hostil que lo transformaran en un cobijo más bello y habitable, era posible…
Intentando igualar la beldad de la naturaleza, este mundo ha conocido las urbes más impresionantes, obra de la imaginación y la genialidad humanas. Pero no sé que diantres ha ocurrido, que a día de hoy esta nave errante continúa con su infatigable misión de encontrarla a ella, la única, la más perfecta y etérea. La utopía de las utopías…
[RÁFAGA]
No sé, si es consecuencia de la marejada que se producía ayer en el triángulo de los leones, pero la influencia de sus corrientes llega hasta la cofa y me incita a revindicar el gen femenino que en su estricta mitad tuvo que tener la persona que levantó nuestra querida Ciudad Invisible…
FUNDIR CON ACELERÓN
No hay comentarios:
Publicar un comentario